31 diciembre 2011

Mis libros de 2011

Y pasados los deseos lectores para el 2012, os dejo la lista de los libros leídos en 2011, puntuados, por si alguno os despierta el interés... me he dado cuenta al terminarla de que mis expectativas para 2012 son muy altas, pero bueno, como esto va de utopías... Por cierto, uno de los libros dejados para 2012 se ha colado al final en 2011, "Mundo del fin del mundo", de Luis Sepúlveda.

La lista está por orden alfabético de autor (nombre). Feliz 2012 a todos.




Título
Autor
Puntuación
La hora azul
Alonso Cueto
***
House of stone
Christina Lamb
***
Cuatro amigos
David Trueba
****
Saber perder
David Trueba
****
The power of the dog
Don Winslow
*****
Los papalagi
Erich Scheurmann
**
El país de las mujeres
Gioconda Belli
***
La biblioteca de los muertos
Glenn Cooper
**
El olvido que seremos
Héctor Abad Faciolince
*****
Cortafuegos
Henning Mankell
***
Todos os nomes
José Saramago
***
Diario de un killer sentimental / Yacaré
Luis Sepúlveda
***
Historia de una gaviota y el gato que le enseñó a volar
Luis Sepúlveda
***
Mundo del fin del mundo
Luis Sepúlveda
***
El club de los faltos de cariño
Manu Leguineche
***
La rosa de Alejandría
Manuel Vázquez Montalbán
***
Andamios
Mario Benedetti
*****
El sueño del celta
Mario Vargas Llosa
*****
Los cachorros / El desafío / Día domingo
Mario Vargas Llosa
***
Las voces del desierto
Marlo Morgan
***
Un millón de piedras
Miquel Silvestre
**
Ochenta y seis cuentos
Quim Monzó
*****
Plata quemada
Ricardo Piglia
*****
The shadow of the sun
Ryszard Kapuscinski
****
Fronteras de arena
Susana Fortes
**
Vida e insólitas aventuras del soldado Iván Chonkin
Vladímir Voinóvich
***

25 diciembre 2011

Cuarenta (más diez) libros para el 2012

Robándole la idea a @Malime_2010, me decidí a hacer una lista de los 50 libros que me gustaría leer en 2012. La verdad es que lo veo difícil de cumplir (supone leer un libro por semana), pero... ¡no imposible!

La cosa es que planificar a este plazo la lectura se me hace muy difícil, y más ahora que he vuelto a ser asiduo de la biblioteca, y que me dejo querer por algún que otro libro que me hace un guiño desde la estantería. Es el caso, por ejemplo, del que estoy leyendo ahora, "El olvido que seremos", de Héctor Abad Faciolince, que es una auténtica delicia.

Así que he decidido hacer, más que un cincuenta, un cuarenta+diez, dejando diez "huecos" para improvisar. Pero vamos, la idea es llenarlos con libros inesperados. Ahí va la lista: 


Título
Autor
1
El ruido de las cosas al caer
Jorge Gabriel Vásquez
2
Sophie Scholl and the white rose
Annette Dumbach
3
A Chistmas Carol
Charles Dickens
4
Savages
Don Winslow
5
Postwar: a history of Europe since 1945
Tony Judt
6
Solar
Ian McEwan
7
Patas Arriba: el mundo al revés
Eduardo Galeano
8
Mundo del fin del mundo
Luis Sepúlveda
9
Nils Holgerssons underbara resa genom Sverige
Slema Lagerlöf
10
Prosperity without growth: economics for a finite planet
Tim Jackson
11
¿Debe el agua de los ríos llegar al mar?
Fernando Magdaleno
12
Sobre la felicidad a ultranza
Ugo Coria
13
Looking for history
Alma Guillermoprieto
14
Los sueños de Helena
Eduardo Galeano
15
Decidme cómo es un árbol
Marcos Ana
16
Vanished kingdoms
Norman Davies
17
Waste
Tristram Stuart
18
The story of stuff
Ann Leonard
19
Che Guevara: a revolutionary life
Jon Lee Anderson
20
The tin roof blowdown
James Lee Burke
21
Reacciona!
VVAA
22
¡Indignaos!
Stéphane Hessel
23
The black dahlia
James Ellroy
24
Catch-22
Joseph Heller
25
A place of my own: architecture of daydreams
Michael Pollan
26
The age of absurdity
Michael Folley
27
It’s all about the bike
Robert Penn
28
La vieja sirena
José Luis   Sampedro
29
No logo
Naomi Klein
30
Failed states
Noam Chomski
31
Walden, or, life in the woods
Henry D. Thoreau
32
Nada será como antes
Carlos Taibo
33
La pirámide
Henning Mankell
34
Huye rápido, vete lejos
Fred Vargas
35
Rojo y negro
Stendahl
36
La mano izquierda de la oscuridad
Ursula K. Le Guin
37
Bodas de sangre
Federico G. Lorca
38
Hay alternativas
Vicenç Navarro et al
39
Inés y la alegría
Almudena Grandes
40
La belleza y el dolor
Peter Englund

27 noviembre 2011

Chantaje

El reloj se me aparecía como una bola de cristal que adivinaba el pasado, el círculo que enmarcaba el retrato de sus personajes. Mi madre abriendo la puerta a su regreso del banco, contando uno a uno los billetes, depositándolos en los dedos inmundos de Chacho. Cada billete resbalaba por su piel, luego entraba en un sobre que ella cerraba. La cara bondadosa y firme de mi madre, la voz que me había reconfortado algunas noches, esa cara y esa voz eran las de la mujer que había ido al banco todos los meses y que con esas mismas manos con las que me había abrazado, estaba sosteniendo el sobre delante del cual iba a extenderse la sonrisa de la señora Agurto.

Alonso Cueto, La hora azul

19 septiembre 2011

Andamios

Cuando empezamos a empaquetar las cosas, antes de venir a Suecia e intuyendo que el tema de los kilos podría ser "un tema", seleccioné 5 libros de los pendientes para leer como potenciales "acompañantes" en este viaje.

Cuando empecé a hacer el equipaje, me di cuenta de que lo de llevar 5 libros iba a estar chungo. Y a medida que iba metiendo jerséis, iba sacando libros. Como lo de venir sin ningún libro no me parecía, digamos, bien, al final decidí elegir solo uno.

Escogí "Andamios", de Mario Benedetti.

Mi historia con este libro no es que sea emocionante, ni siquiera curiosa, pero para mi es especial. Recuerdo dos cosas de cuando salió publicado, en el año 1997. La primera es que conocía el nombre de Benedetti, pero no había leído nada de él, y enseguida me llamó la atención el título, que me pareció poético y prometedor. La segunda, que me encantó la portada, que en esa edición, la original de Alfaguara, era un fragmento del cuadro Homo sapiens, del pintor uruguayo Joaquín Torres García.


Un día, hará un par de años, estaba bicheando la estantería de Laura y Enrico, y lo vi. Les pregunté si lo habían leído, a lo que me respondieron con la misma pregunta. Al oír mi negativa, me dijeron: toma, para vosotros. Fue un bonito regalo, con la intermediación indirecta, todo sea dicho, de Carlos y de su tía, ya que este libro salió de esa colecta que hicieron en su biblioteca, y resultó que ya estaba presente en la de ellos.

Así que decidí que qué mejor libro que este para acompañarnos en la colocación de nuestros primeros andamios en Suecia. Además, habla del exilio, que aunque es una palabra grande, con connotaciones duras, no deja de tener un poco, dejémoslo ahí, de relación con nuestro momento actual.

Ayer terminé de leerlo, triste por su final triste, emocionado por su hondura, su intensidad, su planteamiento y su cercanía.

"Andamios" no habla tanto del exilio como del desexilio. Javier Montes, álter ego del propio Benedetti, emprende el regreso a Uruguay tras doce años de exilio en España, a la que viajó huyendo de la dictadura militar que quiso prenderlo. Benedetti narra las impresiones de Javier al regresar a su país, el reflejo de los años negros de la dictadura en sus amigos, casi todos torturados y encerrados durante varios años, en la sociedad, incluso en las calles.

La venganza siempre viene de arriba. Cuando los de abajo queremos vengarnos, nos revientan. Inexorablemente.


Cada episodio es una historia, una relación o un pensamiento, un reencuentro o una decepción. Te sientes dentro del pellejo de Javier desde la primera línea, viviendo como él esa difícil vuelta a la patria, cómo busca su lugar y cómo solo a veces lo encuentra.

Durante muchos años el país estuvo amputado de muchas cosas y yo estuve amputado del país. (...) hay experiencias incanjeables. En las casas de cambio y en los bancos podés cambiar pesetas por pesos y viceversa, pero no podés cambiar frustraciones por nostalgias.


Benedetti logra transmitir su dolor por el exilio y las injusticias y crímenes de la dictadura con una elegancia que no hace sino mostrar la dignidad de los vencidos y la indignidad de los que los machacaron. No cae en ningún momento en números, ni en insultos, ni en humillaciones a los milicos. En su lugar, en boca de Javier, habla de la tristeza por un país dolorido, por los amigos desaparecidos, por aquello que cambió para siempre no por evolución, sino por la fuerza. Pero también de la ilusión por volver a su tierra, a pesar de todo la suya, por sentarse de nuevo en los cafés de Montevideo con sus amigos, por reencontrarse con su madre y disfrutarla tras tantos años alejado (los capítulos con Nieves, la madre de Javier, son estupendos).

Una historia preciosa, escrita con maestría (como solía hacer Benedetti) y que merece ser disfrutada.

Y gracias a la tía de Carlos, a Carlos, a Enrico y a Laura, por hacérnoslo llegar (aunque los dos primeros no lo sepan).

PS. Reproduzco un párrafo de uno de los capítulos, que me parece que explica muy bien lo que está pasando en cierta autonomía del centro de la Península con el tema educativo... y que puede que se extienda a otras (esperemos que no):

Aquí los jerarcas no se forran con los fondos del Erario público; aquí, defienden desde el Estado las privatizaciones, y no bien las consiguen, se pasan en un santiamén, con armas y bagajes, a la economía privada.El sistema es sencillo. Por ejemplo, quitémosle fondos a la Universidad de la República, y cuando ésta empiece a ahogarse, y los estudiantes, los funcionarios y los docentes se larguen a la calle, señalemos entonces qué ineficaz se ha vuelto la enseñanza pública, aun la superior, y destaquemos una vez más que la solución es la Universidad privada, donde no se producen huelgas y hasta hay una cierta facilidad para titularse, y además, esto es muy importante, como en la privada los estudiantes deben pagar, ello también sirve para eliminar de un zarpazo a los que vienen de abajo.